Descubrimiento final

Al día siguiente la Legión de la Tarántula se reunió en su "caverna" a leer el periódico, donde se relataba cómo la policía, gracias a un detallado mensaje, había capturado al hombre del abrigo en su cuarto de hotel y a la mujer del vestido floreado junto con un comprador de joyas robadas.

El periódico comentaba: "Parece ser que la mujer y el comprador tuvieron una fuerte pelea..."

—¡Ya lo creo! —dijo Tai—. La idea de cambiar el collar por una tarántula de hule debe haber enfurecido al comprador.

Los chicos se desternillaron de la risa.

El periódico continuaba: "El valioso collar apareció cuidadosamente envuelto en el buzón del Museo de los Joyeros..."

—Hubiéramos dejado algún mensaje —comentó Andrés.

—Con el trabajo que me dio encontrar el collar colgado de un alambre de la luz y dentro de un bote, fue más que suficiente —dijo Isabel 21.

—Dejen seguir leyendo —ordenó Oso Verde, y continuó—: ...la policía descubrió un armario lleno de joyas robadas en muchos países con lo que se confirma que se trata de la peligrosa banda de ladrones de joyas buscada por todo el mundo. En la caja donde estaba el collar robado hace unos días, se encontró una nota que decía: Lo sentimos mucho, Señores Ladrones, pero hemos enviado el collar a su dueño. Firmaba la nota La Legión de la Tarántula.

—¡Viva! —gritaron a coro los chicos—. Ya tenemos mucho que contarle a Maripecas cuando la veamos la semana próxima.

—¡Miren! —dijo Andrés observando la foto en el periódico con su lupa—. Acabo de descubrir para qué querían los animales de peluche.

¿Qué descubrió Andrés?

Los muñecos de peluche los utilizaban para meter joyas en su interior como se pueden ver en el gato rayado a la derecha de la foto. Y ahora, veamos:

¿Qué tan buen investigador eres?

Si el número de tus respuestas correctas estuvo entre cero y cinco, vas a tener que practicar diariamente si quieres ser como los miembros de la Legión de la Tarántula.

Entre 6 y 11. Estás en un nivel de iniciar un entrenamiento en serio para ser legionario. Pídele a un amigo que ponga diez objetos sobre la mesa mientras tú esperas en otro cuarto. Luego entra, trata de memorizarlos y regresa a donde estabas y anota en tu libreta de investigador los objetos que recuerdes. Aumenta el número de objetos tan pronto como ya no te cueste trabajo memorizar sólo diez cosas.

Entre 12 y 16. Tu poder de observación es muy bueno y tus deducciones también. Pregunta en tu casa o en la escuela si alguien ha perdido algo, pues estás hecho un investigador de primera.