Libros del Rincón
Ayer el equipo de Paco jugó contra el que vive cerca de la iglesia y ganó fácilmente.
Después todos fueron a tomar un helado a La Michoacana
porque aquí con don Porfirio no hay de naranja ni de fresas con
crema. Nosotras, Adriana Cristina, Rosalía y Luisa, también fuimos.
Todo lo que nos dio risa fue superior. Ahora conseguimos una pelota de volibol con la que todos jugamos siempre, menos cuando ellos juegan futbol porque, perdónenme, pero en el futbol se dan muchas patadas y además uno siempre se ensucia la ropa.